No tengo necesidad de autodefinirme

Entrevista con Pedro Luis Ferrer, dueño de la vaquita Pijirigua y adicto a hablar español y componer décimas…

Por Claudio Pelaez Sordo

Pedro Luis Ferrer en concierto

Pedro Luis Ferrer en concierto

-¿Qué te pareció el concierto?

-Muy bien, muy bien

-¿Cómo se oía para la sala?

-Súper bien, lástima que haya venido poca gente, me parece que se podía haber llenado más. No sé si es la promoción.

-Mucha gente no se enteró. Yo no le avisé a nadie. Confié en la promoción.

Al sorprenderme  como entrevistado comenzó mi conversación con Pedro Luis Ferrer tras terminar su concierto en la Sala Avenida que tristemente no llegó a un tercio de su capacidad. Casi todo el público que acudió peinaba canas y se les veía grabar las canciones con sus celulares y cantar a la misma vez con Pedro Luis Ferrer.

-Por la radio no escuché que se promocionara el concierto- le afirmo.  

-Este es un proyecto del Centro Nacional de la Música que quiere convertir la Sala Avenida en un sitio de concierto. Tienen un catálogo de músicos al cual pertenezco también. Me propusieron hacer el concierto y dije que sí. Las divulgaciones que se hacen una semana antes no funcionan mucho, tiene que hacerse con bastante tiempo de antelación. Esta sala, si se hubiese realizado una buena promoción, se hubiese llenado de personas que les interesa mi trabajo.

Este fue el entremés de la entrevista. A partir de aquí comenzamos a hablar aproximadamente veinte minutos en una de las sillas de la sala. Pedro Luis Ferrer no dudó en entablar diálogo. Después de que su hija Lena, quien forma parte de su grupo, le dijera que estaban interesado en entrevistarlo, bajó del escenario, se acomodó en uno de los asientos y con las piernas estiradas como si estuviéramos en la sala de su casa conversamos.

¿Se presenta en conciertos con frecuencia?

Raúl Ferrer, hermano de Pedro Luis en la segunda guitarra

Raúl Ferrer, hermano de Pedro Luis, en la segunda guitarra

Sí, lo que pasa es que me gusta ir al interior del país. No me gusta la idea de presentarme en La Habana en un mismo lugar como se hace últimamente. Hacemos conciertos en Morón, Ciego de Ávila, Camagüey y funcionan completamente bien y es una manera de renovar el público. No me parece lógico presentarse siempre en el mismo lugar.

Pero a Ray Fernández la peña del Diablo Tun Tun los jueves le ha dado muy buen resultado…

No dudo que en un  lugar en particular funcione. Tuve esa experiencia años atrás en el Museo de Arte Decorativa, pero quienes llenan esos lugares son la misma gente.

Me gusta ir a los pueblos y cantarle a otros públicos, otras culturas. Como soy un guajirito de pueblo campesino vi muchos artistas que iban a mi  pueblo, que me entusiasmaron y me estimularon. Aprendí mucho de ellos.

¿Ahora que se permite criticar, como dice una de sus canciones, cuánto ha cambiado Cuba y cuánto le queda por cambiar?

No puedo decir cuánto ha cambiado Cuba porque no tengo la información hasta donde ha cambiado. Sí noto que muchas cosas han cambiado. Como simple ciudadano cubano veo que mil restricciones y mil prohibiciones que existían han desparecido. Hay más libertad ciudadana y menos trabas administrativas. Se van abriendo nuevas maneras de vivir.

En cuanto al arte y la cultura ha cambiado también mucho. En los años 90 era un problema decir ciertas cosas que dije hoy en el concierto que no tienen ningún problema. Sin embargo, en aquella época había ciertos tabús y prohibiciones absurdas. Todo estaba más confuso.

Creo en la evolución porque la gente habla de la Revolución, pero todos los pueblos evolucionan. La ley se agota en su cumplimiento decía Marx y muchas cosas se cumplieron, se agotaron y se estancaron, entonces hay que transformar la vida. Estamos en ese camino en todos los aspectos. No sé si con la pujanza que se necesita, si está lento o está rápido. En algunas cosas hay que ser moderado, pero en otras hay que apurarse. Como ciudadano medio y como artista percibo que la sociedad cubana se mueve.

¿Continúa la obra de Pedro Luis Ferrer cronicando la sociedad cubana, los cambios que suceden?

Lena Ferrer, hija de Pedro Luis que interpreta algunos temas y hace la percusión menor

Lena Ferrer, hija de Pedro Luis que interpreta algunos temas y hace la percusión menor

Hago mis crónicas quizás de otra manera porque no se hace siempre lo mismo. Te comienzan a interesar otros asuntos, temas que deben contar nuevas aristas para incidir en los procesos. La sociedad cubana debe cambiar no solo en el aspecto externo de la vida, de las estructuras; la espiritualidad del hombre tiene que cambiar también.

De mala humanidad no pueden hacerse buenas instituciones. Hoy me interesa más hablarle a la gente, metabolizar con la gente en ese sentido.

He planteado también otras aristas, la crónica de la espiritualidad de la gente y las propuestas que uno tiene que hacer porque no solo se debe ser un ente pasivo, hay que hacer propuestas a la sociedad. No basta con querer que algo sea de una manera.

Fui un artista en una época que hizo su trabajo, tuve éxito y mucha gente me recuerda y me tiene en cuenta todavía. No me siento arrinconado, ni detrás de nada, me siento con tremenda capacidad, quizás como nunca antes. Me siento de vanguardia, pero reconozco que no quiero hacer lo que hice en otra época aunque conservo en mi repertorio canciones que para mí tuvieron un valor y forman parte de mi identidad.

¿Por qué persistir tras la marginación que sufrió en los años 90?

Esas son preguntas que no me hago. Conmigo hubo la censura que hubo con todos. Lo que me prohibieron a mí se lo prohibieron a todos. No fue un problema conmigo, una censura conmigo. Aquí hubo un ambiente censurante en sentido general.

Hay cosas que se entendían de una forma, por suerte hoy se entienden de otra y se entienden mejor, de una forma más abierta. No creo que haya existido algo personal, no se podían decir, ni hacer ciertas cosas. Hoy hay otras cosas que no se pueden hacer todavía. Todo es dialéctico.

Con la evolución y con el tiempo nos iremos poniendo más de acuerdo y seremos más comprensivos para que la gente tenga más derechos a hacer ciertas protestas. Con arreglo de cierto orden, sin anarquía y sin pisotear el Estado porque necesitamos un Estado que establezca el orden, las normas de la convivencia. Esa es la evolución.

Arrastramos con una cultura que no ha sido democrática. No hemos sido democráticos ni para construir el capitalismo, ni para hacer el socialismo, ni el feudalismo, ni nada. Ese es un déficit que hay en nuestra cultura que con el tiempo deberemos superarlo.

¿Que opina del escenario musical actual donde la trova ya no tiene el mismo predominio, ni la preferencia de antes?

Perdo Luis Ferrer y su grupo

Perdo Luis Ferrer y su grupo

       

No tengo muy claro esos asuntos, no sé ni lo que está pasando. Sé que las modas se imponen, que la divulgación favorece a una manera y no a otra. Sin embargo sí creo que en Cuba hay un público muy receptivo para la trova, que no hay en todos los países. Aquí hay conciertos de trovadores que llenan las salas.

Es posible que ciertas expresiones tengan su público. Hay un público que le sigue interesando la trova, pero hay otro que no le interesa; como hay un público que no le interesa el reggaetón, como hay otro para la música sinfónica. Y hay quien le gusta todo, el reggaetón, la trova, la música sinfónica. Hay de todo. Lo que no me gusta es generalizar y mucho menos dar una opinión si no tengo elementos de juicio.

¿Además de las décimas de su padre, qué heredó de él?

Heredé muchas y otras no, porque uno decanta también. De no haber tenido a mi padre cerca, a mi tío, lo que sé no lo hubiese aprendido con la naturalidad y el apego con que lo hice porque fue pan diario de mi casa hacer décimas, sonetos, cantar. Son esencias presentes en mi trabajo, en mi obra. Se los agradezco porque no todo el mundo ha tenido esa suerte.

En el concierto citó a Carlos Marx y durante la entrevista recurrió a él de nuevo. ¿Es Pedro Luis Ferrer marxista?

"A veces no es tan malo lo que se estudia directamente de una filosofía, sino lo que hacen con ella, para qué la utilizan; cómo la sociedad y los intereses políticos y económicos deforman cualquier cosa que puede ser desfigurada"

«A veces no es tan malo lo que se estudia directamente de una filosofía, sino lo que hacen con ella…»

No es que sea marxista, ni que deje de serlo. Aprendí mucho del marxismo, como aprendí de Martí, y estoy agradecido de ciertas enseñanzas que a mí en lo personal me sirvieron de mucho y me siguen sirviendo. Como me sirven otras corrientes, atender ciertas esencias marxistas, no implica desatender otras.

¿Y si tuviera que autodefinirse?

No veo por qué la necesidad de autodefinirse. Soy un ser humano abierto a todas las corrientes que me llegan. A veces no es tan malo lo que se estudia directamente de una filosofía, sino lo que hacen con ella, para qué la utilizan; cómo la sociedad y los intereses políticos y económicos deforman cualquier cosa que puede ser desfigurada.

Las esencias las nombro y las llevo conmigo porque sí forman parte de mi psicología, de mi intelecto. No tengo esa necesidad ni esa urgencia de autodefinirme. Todos los días estoy encontrando variantes y cuestionando lo que pienso. Vivo bajo la influencia del mundo, como vivo bajo la influencia del Sol, de la Luna, del oxígeno.

Si tuviera que definirme lo haría como un artista, básicamente un artista  que trata con su obra de hacer una nueva realidad, que es la realidad artística. Trato de incidir en la realidad del hombre con mis verdades, relativas como las de cualquiera. Pero ya te digo no tengo necesidad de autodefinirme.

3 comentarios

  1. Bravo Clau por esta entrevista a Pedro Luis, yo no me enteré por ningún lado que iba a dar un concierto, sino me hubiera unido al grupo de las canas. Recuerdo mucho su música, a pesar de haber sido un niño cuando escuchaba sus canciones gracias a mi papá. En la entrevista a tocado el tema de la promoción, creo que ha sido una víctima de ello, y junto a él muchos otros espacios de trova que van decayendo pq al final siempre va el mismo círculo pero no se nutre de gente nueva. En segundo lugar yo creo que el hecho de que se presente poco en La Habana influye en ello, si hiciera un poco más eso ganaría un poco más en presencia en los medios.

    P.D La próxima vez que te enteres de un concierto de Ferrer me informas. jejejeje

    5 de agosto de 2013 en 11:30 PMAgo

  2. delaisla89

    Hola… me gustó mucho la entrevista…. es una manera de adentrarnos a ese P. L. Ferrer que todos conocemos y desconocemos a la vez. Mi generación no conoce el poder de la palabra de este señor, muchas veces incomprendido por ser diferente y llevar la contracorriente de lo que todos decían en falsa unanimidad; pero gracias a mi trabajo he podido saber que no solo La vaquita Pijirigua es inspiración de este hombre que le canta a Cuba y su gente. !Promoción! Una palabra muy poco comprendida (a igual que Ferrer) y que muchas veces se confunde y mal interpreta… a nuestras instituciones les hace falta trazarce verdaderos y eficientes planes de promoción, que el publico sepa como minimo con 15 días que hay una propuesta X en determinado lugar…. el artista tiene que buscar las maneras para que el publico se entere….. mientras siga eso así, dependiendo del otro…. será lo mismo con lo mismo.

    5 de agosto de 2013 en 11:30 PMAgo

  3. Que pena no estar allì, yo vivo a pocos metros de la Sala Avenida. Comparto totalmente las ideas de Pablo Luis Ferrer sobre el marxismo y yo como el no siento nececidades de autodefinirme, aunque me reconozco en el pensamiento socialista libertario.
    Ojalà que Pedro Luis Ferrer vuelve a la Sala Avenida o en otros lugares de La Habana, tengo algunas fotos suyas tomadas en el Centro Pablo de la Torriente Brau y el teatro Mella.

    6 de agosto de 2013 en 11:30 AMAgo

Enciende la mecha